Aceites para el masaje de bebés (y también para adultos, por qué no...)
Utilizaremos
aceites vegetales. Son el lubricante ideal, que permiten realizar los
movimientos con facilidad. Aportan además, una serie de nutrientes
y principios activos muy beneficiosos para el organismo. El aceite
vegetal es cálido y calienta la piel del niño.
Es recomendable
que contengan aceites esenciales en poca cantidad: la piel y el
olfato del bebé son delicados, debemos dedicarles atención.
Aceite de almendras dulces
Es el más usado.
Rico en vitaminas A, B1, B2 y B6 y en ácidos grasos mono y
poli-insaturados. Conviene no utilizar demasiada cantidad para no
engrasar excesivamente la piel.
Aceite de avellanas
Tiene un aroma
agradable. Rico en ácido oleico y con una pequeña proporción de
ácido linoleico. Económico si se mezcla con otros aceites menos
densos (girasol, pepita de uva...)
Aceite de sésamo
Rico en vitamina
E y minerales, especialmente calcio.
Aceite esencial de mirra
Protector de la
piel y regenerador. Previene las infecciones.
Aceite esencial de espliego
Relajante. Es
fungicida y bactericida.
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